Dejemos de hablar de liderazgo por favor

Warren Buffett

Quienes trabajamos asesorando en RRHH, sabemos que hay verdades de las que no se hablan en cuanto a la gestión de las empresas. ¿No es de uso y costumbre quizás?.

La cantidad de publicaciones que veo a diario de “Liderazgo”, comenzó a hacerme ruido hace un tiempo ya. Se enseña en las carreras, se habla de ello en seminarios, se dan lindas

herramientas...que no sirven de nada si la persona no tiene las aptitudes emocionales para

ponerlas en práctica. Si yo siguiese esa línea, estaría engañando a mis clientes: puedes leer

todo lo que quieras de liderazgo, pero si no trabajas las competencias emocionales dónde y con quien se debe, no se producirá la alquimia.

Si alguien no sabe cómo comunicar de forma asertiva, no puede diferenciar lo personal de lo profesional, no sabe poner límites…no puede JAMÁS ser un buen líder. En todo caso un "jefe", y está bien, porque no todos tenemos que ser líderes.

Hay otros temas similares: creatividad, motivación… Una colega muy preciada se reía de un

comentario mío a un potencial cliente que quería un taller mágico de motivación. Ni lo pensé, le dije perdería su dinero haciendo un taller de motivación pues ésta claramente no es un hecho ni un concepto aislado, es fruto de un PROCESO; mi “sincericidio”, como dice mi colega, fue comentarle a alguien con muchos Masters, Postgrados, Congresos, etc. etc. dando por sentado que ya lo sabía, que la motivación no se crea en un taller, se genera con un clima de trabajo amigable, con reglas claras, con un liderazgo confiable, con promesas cumplidas, con medir a todos de acuerdo a los mismos parámetros, con una selección adecuada de personal, donde las personas estén trabajando con el entrenamiento y los recursos necesarios… entonces si lo que de verdad quieres es mantener motivado a tu personal con un taller… pues no” (¡not on my watch!).

En un mundo donde se está queriendo todo “ya”, si me piden algo como si fuese una poción mágica que cambie las cosas; no existe señoras y señores. Van a tener que trabajar con el gran aliciente de que crecerán en el camino, y la inversión les facilitará muchísimo su vida laboral y personal.

Una cosa les quiero decir, cuando encuentras tu forma de liderazgo, todo fluye de otra forma, se disfruta, tu equipo lo disfruta, pero también soporta los embates de la realidad de otra forma, pero si sale sólo de los conocimientos de tu cerebro, no funciona.